sábado, 17 de octubre de 2009

Historia Fábrica de Mieres



Breve historia dé Fábrica de Míeres, S.A.

El 17 de Septiembre de 1.844 y por un grupo financiero inglés encabezado por el financiero Jhon Mauby se constituyó en Londres la Asturiana Mining Company, conocida como Compañía Anglo-Asturiana con capital nominal de cinco millones de francos, donde participaban capitalistas franceses y españoles. Los fines de esta compañía eran la explotación hullera y la creación de Hornos Altos para el aprovechamiento de los minerales de la zona. La sociedad eligió como emplazamiento para su fábrica, la ribera del río Caudal en el pueblo Ablaña en el concejo de Mieres bajo la dirección por un tiempo de Josías Lambert, adquiriendo al mismo tiempo minas de carbón en diversas zonas de los concejos limítrofes.
Esta sería la primera fábrica privada que en España obtuvo el hierro colado o de fundición de cok.

La compañía fracasaría años más tarde, debido a la dispersión geográfica y económica de las explotaciones mineras, condicionadas por la carencia o mala calidad de las comunicaciones existentes.
Para entonces la empresa contaba ya con un Horno Alto, un Taller de Ferrería, 36 Hornos de Cok y un Horno de Cámara para la destilación del cinabrio y obtención del mercurio. La reina Isabel II en R. O. De 26 de marzo de 1849 disuelve la sociedad

A finales de 1.850, por 502.000 francos, el grupo Riansares, a través del banquero Lillo, compraba la fracasada fábrica siderúrgica. En 1852 se inaugura un moderno Horno Alto que consigue una producción anual de 3000/4000 t. de fundición de afino con un coste por tonelada de lingote del orden de 94 pesetas. El 25 de Junio de 1.853, tras un complicado proceso de concentración de diversas empresas mineras y metalúrgicas, se constituyó en París la sociedad Compagnie Miniere et Metallurgique des Asturies, con un capital nominal de cuatro millones de francos en 16.000 acciones, controlada por el grupo Riansares, teniendo a Grimaldi como socio gerente y Lillo como socio comanditario. El día 31 de julio de 1853 la Reina visita Mieres y su industria.

En 1861 se crea en París la sociedad Houillire et Metallurgique des Asturies por el banquero Numa Guilhou y Charles Louis Bertiere que se hizo cargo de la compañía al borde de la quiebra. Al tiempo adquiere también las minas de hulla del duque de Riansares y la mayor parte de las acciones del Ferrocarril de Langreo.
Seguidamente intenta la adquisición de la Fábrica de Aceros de la Bárcena instalada en Villallana y fundada por el Sr. Jacquet y Cía. en 1846, dirigida por Adriano Peillete. En 1867 logra su propósito.

En 1868 la Houillire entra en crisis y es subastada en París en 1870, la compañía fue finalmente adquirida por el banquero parisino D. Numa Guilhou en 2.700.000 francos, pasando a sus manos la fábrica de hierro de Mieres, de acero de Villallana, las pertenencias de carbón de Langreo, Santo Firme y Mieres, los terrenos y propiedades de dichas fábricas y el Ferrocarril de Langreo a Gijón

Las dificultades con que se encontró la anterior sociedad son constantes en los años siguientes, hasta que en 1.873 la empresa contrata al ingeniero D. Jerónimo Ibrán, que con un buen equipo renueva las instalaciones, crea nuevos talleres y pone gran interés en la formación técnica y profesional de los trabajadores, para convertir el ruinoso negocio en una empresa rentable.

En 1874 dos hechos relevantes dan un impulso a la siderurgia asturiana y en especial a la de Mieres y nos son otros que la inauguración del ferrocarril Lena-Gijón y el estallido de la Guerra Civil en las provincias vascas haciendo que la siderurgia local aumente la producción de forjados y laminados.

En 1875 la sociedad cuenta con dos Hornos Altos y sus accesorios que le permiten una producción media diaria de 33 t.; una batería de 40 hornos tipo Francois para obtención de cok con una producción de 800 q ./día; un taller de pudelado de 13 hornos de bolas y dos baterías de trenes de laminación para producir hierro basto y laminado; también cuenta con talleres auxiliares de moldería, forja, etc.

El 23 de Marzo de 1.879, constituyen D. Numa Guilhou y D. Protasio García Bernardo, ante el Notario de Mieres, D. José García Babia, la Sociedad Anónima Fábrica de Mieres, que nace con un capital social de 17.000.000 de pesetas. Un proceso creciente lleva a disponer en 1.881 de tres altos hornos, dos trenes de pudelar, tres para fabricar fleje y uno de chapa, además de otros cuatro hornos de pudelar de caldera horizontal y muchas más instalaciones complementarias.

El banquero y empresario frances D. Numa Guilhou, nacido en la localidad de Mazamet, en 1817, falleció en el Padrún, Mieres en 1.890 a la edad de 73 años y fue enterrado en un pequeño y abandonado cementerio protestante.

En 1901, se pone en funcionamiento otro nuevo horno alto, un horno de acero Siemens- Martin y una batería de 48 hornos para la fabricación de cok y aprovechamiento de subproductos. Fue la primera fábrica de España en utilizar cok para obtener el hierro colado.

En 1.903, el resumen de producción de Fábrica de Mieres, fue el siguiente:

Hierro Colado 20.897 Tm.
Hierro Laminado 12.387 Tm.
Lingote de Acero 4.000 Tm.
Acero Laminado 9.648 Tm.

El Rey Alfonso XIII con fecha 16 de marzo de 1911 concede el título de "Conde de Mieres de Camino al ingeniero D. Manuel Loring y Martínez Heredia, Director de la Fábrica y Minas de Mieres. El título pasaría a su hijo el licenciado en derecho D. Manuel Loring y Guilhou como segundo Conde, de éste a su hijo el ingeniero de Minas D. Manuel Loring y Martínez de Irujo como tercer conde de Mieres y de éste a su hijo.

De sus instalaciones mineras en los años de la I Guerra Mundial la empresa batía récords siendo sus producciones:

Año Plantilla Producción Tm.
1914 2586 353.461
1915 2687 374.579
1916 3625 383.266
1917 4480 383.214

En la plantilla se incluye también el personal de fábrica. Otras producciones de carbón en los años 1940, 1950 Y 1960 fueron:

Puesto Año Plantilla Producción Tm.
2° 1940 1822 410.480
3° 1950 2941 408.400
2° 1960 3110 632.630

Los años 1934 a 1943 fueron de crisis como consecuencia de los conflictos bélicos nacionales y no es hasta 1948 cuando empieza de nuevo a recobrar empuje con una nueva batería de cok y la puesta en servicio del Horno Alto n° 1 apagado desde 1944. En 1951 se compran los terrenos de la vega de Sueros y se empieza a construir el Lavadero Central de Carbones. El capital social de la Empresa que era de 80 millones pasa a 329 millones en 1955. En 1958 se derriba el Horno Alto n° 1 y en su lugar se levanta el n° 2 con una capacidad de producción de 250 t/día empezando a producir a mediados de 1959 momento en que comienza a construirse una nueva batería de cok tipo Otto-Under Jet con una producción de 182.500 t/año.

En 1964 se puso en marcha un nuevo tren de laminación de 750 mm. y los Hornos Pita Ofu, los gasómetros de gas rico y pobre y la red de distribución de gas. El taller de Construcciones Metálicas aumentó su producción hasta las 800 t/m. En el Taller de Aceros se acometieron importantes reformas que aumentaron su producción. En 1965 se produjeron 109.000 t. de acero.

La Fábrica de Mieres, junto con otras cinco empresas, fue una de las fundadoras de la Empresa Nacional Hulleras del Norte S.A. (HUNOSA), en Julio de 1967, a la que aportó sus efectivos mineros. El Decreto fundacional de la Presidencia del Gobierno tiene fecha de 9 de Marzo del mismo año.
Posteriormente, a lo largo del período comprendido entre la fecha anterior y Enero de 1.970, se fueron integrando en la nueva Sociedad la mayor parte de las empresas mineras de la cuenca central asturiana.

La creación de la Unión de Siderúrgicas Asturianas S.A. (UNINSA), el 30 de Julio de 1.966, en escritura otorgada ante el Notario de Gijón D. Emiliano Javier Migoya Valdés, fijando el domicilio social de la empresa en Gijón, constituye el primer paso para el desmantelamiento de la Fábrica de Mieres, cuyos trabajadores van siendo trasladados de forma escalonada a la factoría de Gijón. En el año 1974 comienza el cierre de instalaciones, iniciándose por la acería Martin-Siemens; continúa en 1976 con la clausura del horno alto, al que seguiría la batería de cok y finalmente, en el año 1.980, Fábrica de Mieres cierra su última instalación, el tren de chapa, incorporando al resto de su plantilla a las Factorías de Gijón y Avilés.

El 1 de junio de 1968 un Decreto califica a Mieres como "Zona de preferente Localización Industrial" con intención de paliar los efectos de la desaparición de la Empresa.

El aspecto patrimonial se resolvió de diversas formas, en una época muy posterior, cuando ya ENSIDESA ostentaba la titularidad de la propiedad, tras su fusión con UNINSA.
Por una parte, con fecha 6 de diciembre de 1984, se suscribe entre el Principado de Asturias, el Ayuntamiento de Mieres, ENSIDESA y METALSA, un Convenio para el desarrollo urbanístico de los terrenos que dichas Sociedades poseían en el Concejo de Mieres, en un intento de frenar el declive económico y poblacional que la localidad venía padeciendo desde la década de los sesenta, debido fundamentalmente al cierre de las instalaciones siderúrgicas.

En el ámbito social, el 10 de enero de 1898, D. Ernesto Guilhou, hijo de D. Numa, su esposa Dª Enriqueta y su hija Jacoba, fundan en Ablaña, Mieres una escuela para niñas, dirigida por las Hermanas Dominicas de la Anunciata, con el fin de educar e instruir gratuitamente a las hijas de sus obreras y empleados.
A principios del siglo XX la empresa instala dos economatos para abastecimiento de los trabajadores y sus familias, uno de textil y calzado y otro de alimentación.
En 1.904 abren otro colegio para niños, iniciándose las clases en una casona en el Barrio de La Villa, con capacidad para 120 alumnos. Ante la demanda de plazas, se necesitaron nuevos locales y las aulas se trasladaron a una casa que posteriormente sería un cuartel en la Calle Campo Sagrado (hoy Calle Manuel Llaneza). El 13 de noviembre de 1915 se iniciaron las obras de un nuevo colegio con patio para recreo, capilla, biblioteca y sala de juegos, inaugurándose en 1918. Es el Colegio Santiago Apóstol hoy convertido en colegio público. De la formación se encargaron desde el principio los Hermanos de la Doctrina Cristiana San Juan Bautista de la Salle. Como dato curioso, se recuerda que entre los años 34 y 38, por imposición de la República, éstos hubieron de cambiar el hábito que les identificaría popularmente como "Los frailes del baberu", por un traje seglar.
Los Hermanos de La Salle abandonaron el Colegio en 1972, pasando éste a titularidad pública.

Muy posteriormente, a finales de los años cuarenta, ante el flujo de inmigrantes llegados a Mieres durante la posguerra para trabajar en las minas y la fábrica de Mieres, se construyen dos amplias barriadas de protección oficial en las que una buena parte de sus habitantes serían trabajadores de la Empresa: El barrio de San Pedro al norte y seguidamente, año 1949, el de Santa Marina, en la parte sur a orillas del río Caudal, con equipamientos propios (mercado, iglesia, escuela, etc.). Años más tarde, en el centro de la villa, se construiría otra barriada también de protección oficial, sin equipamientos propios, conocida popularmente como "Tocote", por razón del sorteo efectuado para poder obtener una vivienda. Para el año 1960 ya se habían inaugurado más de un millar de viviendas en las que de alguna forma había intervenido la Sociedad.
A mediados de los años cincuenta, la Empresa patrocinaba varios equipos deportivos teniendo especial relevancia los de jockey y natación. En 1960 funcionaban colonias infantiles en Villamanín y Tapia de Casariego, destinadas a hijos de trabajadores y se disponía de una biblioteca, academia de idiomas, salas de lectura y juegos y un hogar que albergaba la sección cultural.

En el año 1956, ante la necesidad de contar con personal obrero cualificado para sus instalaciones, al igual que otras empresas importantes de la región (Ensidesa, Fábrica de Armas de Trubia y Duro Felguera), crea su propia Escuela de Aprendices; dirigida también por los Hermanos de La Salle, aunque de corta vida, de 1956 a 1968, ejerció una fructífera labor formando a más de trescientos jóvenes en disciplinas mecánicas y eléctricas que encontrarían empleo en sus instalaciones fabriles y mineras.

En el terreno de los conflictos laborales, Fábrica de Mieres, además de otros de menor relevancia, se vio inmersa en la gran huelga minera, a primeros de abril de 1906 conocida como la Huelgona y en la no menos importante de 1962 que se extendió a otros sectores por varios puntos de España.


* Datos obtenidos de la Gran Enciclopedia de Asturias

Julio C. Suárez Quirós
Ángel García Díaz